La simulación Hardware-in-the-Loop (HIL) es un método crítico que permite a los ingenieros probar y validar sistemas de control en un entorno virtual seguro y controlado, sin depender de prototipos físicos. Al simular un sistema del mundo real en tiempo real, HIL permite a los desarrolladores integrar hardware real con un modelo virtual, acelerando el desarrollo, reduciendo costes y aumentando la seguridad. Esta técnica es especialmente útil en sistemas complejos en los que los errores durante las pruebas en el mundo real podrían resultar caros o incluso peligrosos.
Adoptado originalmente en industrias como la aeroespacial y la automovilística, el HIL se ha extendido desde entonces a sectores como la energía, las comunicaciones, los dispositivos médicos y la robótica. A medida que los sistemas embebidos se vuelven más avanzados e interconectados, la necesidad de pruebas fiables y repetibles es mayor que nunca. HIL proporciona a los ingenieros la capacidad de realizar pruebas rigurosas y de alta fidelidad en diversas condiciones, todo ello desde la seguridad de una simulación.
At its core, HIL simulation involves connecting a physical controller or hardware system to a real-time virtual model that simulates the system it is designed to control. This “loop” allows engineers to test the control algorithms as if they were interacting with the real-world system, but without the need for the actual hardware. The system’s components interact with the simulation via input and output interfaces, creating a seamless integration between the virtual and physical environments.
A typical HIL setup consists of three main components:
En la práctica, los sistemas HIL permiten a los desarrolladores sustituir determinados componentes de un sistema por modelos virtuales, integrando gradualmente más hardware del mundo real a medida que avanza el desarrollo. Por ejemplo, al probar una ECU de automoción, la dinámica de un motor puede simularse en software, mientras que el hardware de la ECU interactúa con el modelo simulado, como lo haría en un coche real. Esta configuración permite a los ingenieros validar los sistemas de control al principio del ciclo de desarrollo, sin arriesgarse a dañar equipos caros o delicados.
1. Desarrollo rentable
Una de las ventajas más significativas de la simulación HIL es el ahorro de costes. Probar prototipos en el mundo real, sobre todo en industrias como la aeroespacial o la automovilística, puede ser prohibitivamente caro. El coste de construir, mantener y utilizar entornos de prueba físicos, por no mencionar el riesgo de dañar hardware caro durante las pruebas, puede aumentar rápidamente. HIL elimina gran parte de estos gastos al permitir que las pruebas se realicen en un entorno virtual.
Por ejemplo, en el desarrollo de motores a reacción, utilizar un motor físico para cada prueba no sólo es caro, sino también poco práctico. Un solo motor a reacción puede costar millones de dólares, mientras que un sistema HIL de alta fidelidad diseñado para simular todo el motor puede construirse por una fracción de ese coste.
2. Mejora de la seguridad
La seguridad es una de las principales preocupaciones a la hora de probar sistemas de alto riesgo, como los sistemas de frenado de los automóviles o los sistemas de control de vuelo. Los métodos de prueba tradicionales requieren el uso de prototipos físicos, lo que puede ser arriesgado si se produce un fallo durante la prueba. HIL elimina este riesgo al permitir que los sistemas críticos se prueben en un entorno controlado y simulado, donde los fallos pueden analizarse sin ningún peligro en el mundo real.
Por ejemplo, en aplicaciones aeroespaciales, el HIL se utiliza para probar sistemas de control de vuelo en escenarios que serían demasiado peligrosos para reproducirlos en la vida real. Los ingenieros pueden simular fallos críticos o condiciones extremas para asegurarse de que el sistema se comporta correctamente sin arriesgarse a dañar el equipo o perjudicar a los pilotos de prueba.
3. Flexibilidad y repetibilidad
Las simulaciones HIL ofrecen una flexibilidad sin igual en las pruebas. Los ingenieros pueden realizar pruebas en diversas condiciones, ajustando los parámetros sobre la marcha sin necesidad de modificar físicamente el hardware o reconfigurar las configuraciones de prueba. Esto permite iteraciones rápidas y pruebas exhaustivas en múltiples escenarios, incluidos casos extremos que podrían ser demasiado difíciles o arriesgados de probar en la vida real.
Además, las pruebas HIL son altamente repetibles, lo que significa que la misma prueba puede realizarse en condiciones idénticas varias veces. Esto es especialmente útil en sectores como el de la automoción, donde los requisitos normativos exigen rigurosos procesos de validación antes de implantar un nuevo sistema.
4. Ciclos de desarrollo más rápidos
Los métodos de prueba tradicionales a menudo ralentizan el desarrollo debido al tiempo necesario para construir prototipos físicos y establecer entornos de prueba en el mundo real. HIL permite un desarrollo paralelo, en el que los equipos de software y hardware pueden trabajar simultáneamente. Los algoritmos de control pueden probarse y perfeccionarse en el entorno virtual, incluso antes de disponer del hardware físico.
Por ejemplo, las empresas de automoción pueden probar el rendimiento de las nuevas ECU en un entorno de conducción simulado mucho antes de que esté listo un prototipo de vehículo. Esto no sólo acelera el tiempo de comercialización, sino que también ayuda a identificar y solucionar problemas antes en el proceso de desarrollo, reduciendo la probabilidad de costosos rediseños posteriores.
Sistema de pruebas HIL: Máquina electrodinámica y Software de STEP Lab, y hardware de VI-Grade.
La simulación hardware-in-the-Loop (HIL) es una herramienta que cambia las reglas del juego en el mundo de la ingeniería y el desarrollo, y ofrece ventajas que van desde el ahorro de costes hasta el aumento de la seguridad y la flexibilidad. Al crear un puente entre las simulaciones virtuales y el hardware del mundo real, HIL permite pruebas más rigurosas, ciclos de desarrollo más rápidos y la posibilidad de explorar una gama de escenarios más amplia que nunca.
A medida que las industrias sigan evolucionando y adopten sistemas integrados más complejos, el papel del HIL no hará sino crecer. Ya sea probando sistemas de conducción autónoma, garantizando la seguridad de los controles de vuelo o validando sistemas de energías renovables, HIL está demostrando ser una herramienta inestimable para crear tecnologías más seguras y fiables.
¿Qué significa HIL?
HIL son las siglas de Hardware-in-the-Loop, un método de prueba que integra componentes de hardware reales con un entorno virtual simulado. El objetivo es probar y validar sistemas de control en tiempo real simulando el comportamiento del resto del sistema, permitiendo que el hardware interactúe como si estuviera en un escenario del mundo real.
¿Para qué se utiliza el HIL?
HIL se utiliza para probar y validar sistemas de control en las primeras fases del ciclo de desarrollo. Es especialmente útil en sectores como la automoción, el aeroespacial y la energía, donde es necesario probar sistemas complejos como unidades de control electrónico (ECU), sensores o actuadores en condiciones realistas. Permite a los ingenieros realizar pruebas en componentes individuales sin necesidad de prototipos totalmente montados, garantizando que el sistema funcionará correctamente en condiciones reales.
¿Cuáles son los componentes del sistema HIL?
Un sistema HIL típico consta de tres componentes principales:
¿Por qué necesitamos pruebas HIL?